La compañía de tecnología médica y seguridad Dräger va a ampliar aún más su capacidad en el campo de la ventilación centrada en la protección de los pulmones de los pacientes, al hacerse con la participación mayoritaria de STIMIT, empresa suiza del sector de la tecnología médica, especializada en la activación y estimulación no invasiva del sistema respiratorio de pacientes en cuidados intensivos.

Las diferentes fases de una enfermedad, a menudo, pueden requerir de respiración artificial, como sucede, por ejemplo, con el nuevo coronavirus.

Cuando un paciente ya no es capaz de respirar lo suficiente por sí solo, la ventilación mecánica puede ser clave a la hora de salvar vidas. Sin embargo, después de varios días de ventilación asistida, existe el riesgo de que el sistema respiratorio se debilite. Para que los pacientes puedan volver a respirar por sí mismos el diafragma, como músculo respiratorio más importante, debe mantenerse y fortalecerse.

"Con Dräger a nuestro lado, conseguiremos establecer una terapia novedosa basada en evidencia clínica y útil para los pacientes", asegura Ronja Müller-Bruhn, fundadora y CEO de STIMIT AG. “La inversión de Dräger en STIMIT combinará la innovación y el ritmo de una empresa emergente, con la experiencia, la riqueza tecnológica y el espíritu empresarial del proveedor líder en materia de cuidados respiratorios, Dräger”, explica el doctor Georg Matheis, director de STIMIT AG.

"El equipo de STIMIT está entusiasmado por trabajar con Dräger en el desarrollo de productos que den lugar a una nueva terapia que mejore el cuidado de pacientes críticos".

“STIMIT está trabajando en una solución que aún no está disponible en el mercado. Por lo tanto, al adquirir una participación mayoritaria, Dräger toma la delantera en el desarrollo de la estimulación no invasiva en sistemas respiratorios”, afirma Stephan Kruse, Head of Business Unit Therapy at Dräger. “Como expertos en tecnología de ventilación, conseguir que el tratamiento sea lo menos invasivo posible mediante la puesta en marcha de nuevas soluciones innovadoras, es de especial interés para nosotros”.

En los próximos meses, Dräger y STIMIT trabajarán de forma conjunta para mejorar el producto y llevar a cabo los pertinentes ensayos clínicos.

Actualmente, la duración del proceso de retirada de la ventilación artificial en los pacientes de UCI equivale a aproximadamente entre el 40 y el 50 por ciento del tiempo total de hospitalización. De hecho, por lo general, el proceso de destete se vuelve más difícil a medida que aumenta el tiempo de ventilación. A largo plazo, la estimulación electromagnética del diafragma pretende ayudar a acortar el período de ventilación y, con ello, reducir el tiempo de hospitalización y el riesgo de futuras complicaciones.