El sector farmacéutico ha evolucionado mucho en los últimos años, y cada vez son más las personas que deciden formarse en las áreas de farmacia y parafarmacia con el fin de trabajar en uno de los sectores con más futuro en el ámbito sanitario.

El profesional que se dedica a esta área tiene una serie de funciones y responsabilidades en su día a día que son de vital importancia. A continuación, veremos cuáles son y por qué es tan relevante la formación profesional en su labor. Para ello, si estás interesado en formarte en este sector, os aconsejamos echarle un vistazo al Fp de farmacia y parafarmacia en Implika para conocer la metodología, el temario y la enseñanza para esta profesión.

Un técnico de farmacia es el profesional que se encarga de apoyar al farmacéutico y reforzar su labor.

Antes de centrarnos en las funciones, es conveniente saber, quién es un técnico de farmacia y cuál es su tarea u objetivo principal. Según la definición más genérica, un técnico de farmacia es el profesional que se encarga de apoyar al farmacéutico y reforzar su labor.

Labores diarias de un técnico de farmacia

El técnico en farmacia debe tener ciertas nociones y conocimientos de ciencias de la salud, como la anatomía, la fisiología, la patología, la farmacología, la farmacoterapia, las recetas médicas, las operaciones de laboratorio y la formulación magistral.

El técnico en farmacia debe tener ciertas nociones y conocimientos de ciencias de la salud.

Los técnicos de farmacia son clave para las labores diarias de millones de farmacias en todo el mundo y las de los centros hospitalarios, y es por eso por lo que la figura de este profesional se ha convertido en un perfil con alta demanda en la actualidad.

Los técnicos de farmacia son clave para las labores diarias de millones de farmacias en todo el mundo.

En la labor del técnico de farmacia no hay dos días iguales, lo que la convierte en una gran profesión para las personas que se adaptan al cambio y a un entorno acelerado. La carrera de un técnico de farmacia incluye una gran variedad de tareas importantes que afectan la salud y el bienestar de las personas, lo que también la convierte en una gran opción para las personas que se preocupan por ayudar a los demás.

La principal diferencia entre el Técnico de Farmacia y el auxiliar de farmacia es su formación.

Muchas personas usan el término de auxiliar de farmacia para referirse al técnico, pero, sin embargo, está mal definido y es un error muy frecuente. La principal diferencia entre el Técnico de Farmacia y el auxiliar de farmacia es su formación. El auxiliar no cuenta con el tipo de formación específica que se requiere, mientras que para ser técnico sí que hay que estar formado.

Estas son las principales funciones del técnico farmacéutico:

1. Dispensación de productos farmacéuticos y parafarmacéuticos. El técnico tendrá la responsabilidad de informar al usuario sobre las características del producto que adquiere, así como de las indicaciones de uso.
2. Toma de constantes vitales como la presión sanguínea, el nivel de oxígeno o glucosa en sangre, y registro de otros parámetros somatométricos como el peso y la altura. También debe prestar atención básica en situaciones de emergencia y tener conocimientos en primeros auxilios.
3. Operaciones básicas de laboratorio y conocimientos en anatomofisiología y patologías básicas.
4. Utilización de aplicaciones informáticas para la tramitación de recetas. El técnico deberá conocer las herramientas digitales para la gestión de recetas farmacéuticas y su facturación.
5. Asesoramiento en productos parafarmacéuticos. Este profesional tendrá la capacidad de asesorar a los clientes, sobre todo en productos que no tengan carácter médico, como productos de higiene íntima, cosmética o cuidado capilar. El técnico debe tener conocimientos en salud u otros productos derivados y asesorar a los clientes de manera personalizada.
6. Administración. El técnico en farmacia se encarga de la gestión de la documentación generada en el establecimiento y otras tareas administrativas, como el control de almacén, respetando siempre la calidad, seguridad y protección ambiental.
7. Mantenimiento del material y los equipos para el correcto estado de todas las instalaciones y servicios del establecimiento.
8. Asistencia al farmacéutico en la elaboración de productos farmacéuticos y parafarmacéuticos. Con sus conocimientos profesionales, el técnico podrá colaborar de manera activa en la elaboración de productos en la oficina de farmacia.

Si es un técnico de farmacia hospitalaria, se encargará de preparar los productos a distribuir en hospitales, siempre bajo la supervisión del farmacéutico.

Todas las funciones del técnico farmacéutico son de vital importancia y deben realizarse siguiendo principios y reglas éticas de la profesión, como tener el objetivo de mejorar la salud de la población y facilitar la correcta aplicación de sus productos.

Todas las funciones del técnico farmacéutico son de vital importancia y deben realizarse siguiendo principios y reglas éticas de la profesión.

Si te gusta la industria de los medicamentos, el ámbito de las farmacias privadas, hospitalarias o en laboratorios, esta es una profesión de futuro asegurado, de gran variedad de tareas en tu día a día y donde adquirirás muchos conocimientos y experiencia del sector.

El auxiliar no cuenta con el tipo de formación específica que se requiere, mientras que para ser técnico sí que hay que estar formado.

Es una forma de ayudar a los demás, informando y proveyendo de medicamentos a quienes los necesiten. Te ayudará a adquirir hábitos de organización y responsabilidad, aprenderás pautas de atención al cliente para saber cómo debes atender a los diferentes consumidores en ciertas circunstancias, como también, estar al día en el área de la salud.