En España, 1 de cada 4 adultos padece una enfermedad reumática, cerca de 11 millones de personas. Esta cifra podría aumentar en los próximos años, puesto que algunas enfermedades reumáticas se asocian a la edad. Esto conllevaría un aumento de los requerimientos asistenciales, que ya son insuficientes a día de hoy, debido a que existe un déficit de reumatólogos.

No obstante, patologías reumáticas como las enfermedades reumáticas autoinmunes sistémicas (ERAS), afectan a jóvenes y su cronicidad pueden suponer un aumento del gasto para el sistema sanitario dada su cronicidad. "En estas patologías el sistema inmunitario agrede al propio organismo del paciente y pueden verse afectados diferentes órganos, como los riñones, el corazón, los pulmones o el sistema nervioso", explica la doctora Sagrario Bustabad, presidenta de la Sociedad Española de Reumatología (SER). "Si se tiene en cuenta las patologías crónicas en seguimiento en los servicios de Reumatología, probablemente las ERAS ocupen en torno al 20 % de las consultas", detalla.

En el marco del IX Simposio de Enfermedades Autoinmunes Sistémicas de la Sociedad Española de Reumatología, que se celebra el 16 y el 17 de febrero en Bilbao y reúne a más de 350 especialistas, la doctora Bustabad, jefa del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario de Canarias, ha destacado la necesidad de que los reumatólogos estén "a la última" en el ámbito de las ERAS. Se trata de afecciones de causa desconocida, aunque en la mayoría de los procesos existe una predisposición genética.

"En estas patologías se sabe que intervienen ciertos factores ambientales que permiten que se exprese o no uno o varios genes en un sujeto, determinando o no la enfermedad", como "el consumo de tabaco, la exposición al sol, ciertas infecciones virales, algunos fármacos, situaciones de estrés vital y otros peor definidos. Algunos de estos factores pueden influir en la evolución de la enfermedad, favoreciendo brotes de actividad o un peor pronóstico", ha detallado Sagrario Bustabad.

Principales avances y retos

"Probablemente, existe un infradiagnóstico en cuadros menos prevalentes de ERAS y se da un diagnóstico tardío en algunas vasculitis que, para cuando las personas afectadas presentan clínica sistémica, pueden llevar años de evolución", ha indicado la doctora María Luz García Vivar, jefa del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario de Basurto. No obstante, ha recalcado que "el mejor conocimiento de las diferentes enfermedades, los biomarcadores y las nuevas clasificaciones van encaminadas a que los cuadros clínicos se puedan diferenciar y definir o diagnosticar antes, por lo que resulta fundamental seguir trabajando en esta línea".

A su juicio, "se sigue avanzado de forma significativa en el conocimiento, se mejora la clasificación de las diferentes enfermedades autoinmunes sistémicas, se utilizan índices de actividad y de daño orgánico para ajustar el tratamiento de forma adecuada, etcétera. Además, se ha estandarizado el manejo integral del paciente y diversificado las opciones de tratamiento, permitiendo utilizar los corticoides en menores dosis y durante períodos más cortos".

"Existe un amplio campo en investigación en relación con los mecanismos etiopatogénicos y de nuevas dianas terapéuticas que permiten mejorar las opciones de tratamiento para las personas con ERAS", ha añadido la doctora García Vivar, presidenta del comité organizador del IX Simposio SER de EAS. "El futuro se encamina hacia la terapia personalizada, pero queda mucho por andar", ha recordado.