El uso inteligente de los fármacos biosimilares debe redundar en mayores resultados en salud. Esta es la principal conclusión de la iniciativa “Biosimilares para una sanidad basada en el valor” organizada por Kern Pharma y que ha presentado su documento de consenso en un encuentro virtual.

Los biosimilares abren una oportunidad para desarrollar una sanidad más eficiente resolutiva y sostenible, ya que sus ventajas van mucho más allá del precio. Tal y como se destaca, "su aportación a la generación de competencia e innovación permiten contribuir a la sostenibilidad con una mayor eficiencia en el uso de recursos. Y juegan también un papel clave en el acceso de los pacientes a terapias biológicas adecuadas, generalmente en patologías de alta complejidad". En este sentido, el documento recoge el deber ético de los gestores y profesionales de procurar un amplio acceso a los biosimilares para maximizar el beneficio clínico y la equidad en el sistema.

La implementación de políticas sanitarias, de modelos adecuados de adquisición y de acciones formativas e informativas deben ser claves para facilitar el uso efectivo de biosimilares, su aceptación clínica y una competencia saludable del sector, aunando la contribución al sistema con las necesidades de los pacientes. En esta línea, una de las conclusiones que recoge el documento es que "el principal error que se comete en la incorporación de biosimilares a la práctica clínica es considerar el ahorro de costes como único objetivo". Asimismo destaca que ,"hace falta promover políticas sanitarias activas que establezcan una competencia saludable con precios sostenibles y políticas de incentivos a favor de los biosimilares". 

El valor en salud consiste en tomar decisiones que aporten el mejor valor a los pacientes y que aseguren una atención universal de calidad y segura en todo el sistema de salud. Por eso,según este trabajo, "se requieren acciones formativas e informativas a profesionales y pacientes; integrar los resultados más relevantes para el paciente en la toma de decisiones y promover modelos que evalúen la mejora de la gestión clínica que posteriormente puedan emplearse en la toma de decisiones". Asimismo, reconoce que es clave estandarizar los resultados para comparar y compartir conocimiento, generar infraestructuras de datos integradas para intercambiar información, coordinar modelos de análisis y evolucionar hacia un modelo basado en resultados.