Hoy, como cada 14 de junio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra el Día Mundial del Donante de Sangre, con el fin de dar a conocer la necesidad de disponer de sangre y productos sanguíneos inocuos y agradecer a los donantes su colaboración. La sangre es un recurso indispensable en todos los tratamientos programados, en las intervenciones urgentes, y en la atención materna y perinatal.

Muchos países tienen dificultades para conseguir que el suministro de sangre sea suficiente, y garantizar al mismo tiempo su calidad e inocuidad.

Asimismo, es esencial para tratar a los heridos durante urgencias de todo tipo (desastres naturales, accidentes, conflictos armados, etc.). En la última década, los desastres han provocado más de 1 millón de víctimas mortales, mientras que las personas afectadas anualmente por emergencias superan los 250 millones. Las transfusiones sanguíneas son un elemento fundamental en este tipo de situaciones, sin embargo, muchos países tienen dificultades para conseguir que el suministro de sangre sea suficiente, y garantizar al mismo tiempo su calidad e inocuidad.

La campaña de este año se centra en la donación de sangre durante las emergencias.

De este modo, la campaña de este año se centra en la donación de sangre durante las emergencias, durante las cuales todos solemos preguntarnos: "¿Qué puedo hacer?" "¿Cómo podría ayudar?". Por ello, la consigna de la campaña de 2017 es: "¿Qué puedes hacer?" con el siguiente mensaje secundario: "Dona sangre. Dona ahora. Dona a menudo". Esta campaña subraya la posibilidad que cada persona tiene de ayudar a otras en situaciones de urgencia donando sangre. También se hace hincapié en la importancia de donar sangre periódicamente, para contar con una reserva de sangre suficiente antes de que se presente la emergencia. Los principales objetivos que la OMS se marca en el Día Mundial del Donante de Sangre de 2017 son:

• Alentar a todas las personas a que donen sangre para que los servicios de salud de su comunidad estén preparados para una situación de emergencia.
• Implicar a las autoridades en el establecimiento de programas nacionales eficaces de donantes de sangre.
• Promover la inclusión de servicios de transfusión de sangre en actividades de preparación y respuesta ante emergencias nacionales.
• Dar a conocer ampliamente entre la población la necesidad de comprometerse a donar sangre durante todo el año.
• Homenajear y agradecer a las personas que donan sangre periódicamente y alentar a los jóvenes a que también sean donantes.
• Promover la colaboración internacional.