Ha pasado más de un año y medio desde el inicio de la pandemia, contamos con el 78% de la población española con la pauta completa de la vacunación y la curva de contagios sigue evolucionando favorablemente,pero todavía no hemos superado por completo los efectos de la Covid-19 en nuestras vidas.  Más allá de las posibles secuelas físicas de algunas de las personas que han padecido la enfermedad (lo que conocemos como “covid persistente”), la pandemia también ha impactado gravemente en nuestra salud mental.

Ansiedad, depresión, miedo, aislamiento, trastornos del sueño o estrés postraumático. Estos son algunos de los síntomas de esta nueva pandemia causada por la Covid-19. Hemos tenido que confinarnos en nuestros domicilios, cambiar tanto nuestra forma de trabajo como la de relacionarnos, y por desgracia, muchos hemos perdido a nuestros seres queridos. Una situación inesperada que ha afectado no solamente a nuestra salud física, sino que también ha tenido un fuerte impacto en nuestra salud mental.

De hecho, poniendo algunos datos sobre la mesa, según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), durante este primer año de pandemia, un 6,4% de la población ha acudido a un profesional de la salud mental por algún tipo de síntoma, el mayor porcentaje (un 43,7%) por ansiedad y un 35,5% por depresión. Siendo un colectivo especialmente vulnerable el de los más jóvenes, ya que la encuesta del CIS sobre los efectos psicológicos de la pandemia muestra que el 52,2% de los padres que han convivido con sus hijos menores ha percibido cambios en su forma de ser. El 72,2% asegura que han mostrado “cambios de humor” y un 30,4% “cambios en el sueño”.

"Un 6,4% de la población ha acudido a un profesional de la salud mental por algún tipo de síntoma, el mayor porcentaje (un 43,7%) por ansiedad y un 35,5% por depresión".

Por eso resulta clave el uso de herramientas que ayuden a combatir las secuelas psicológicas de la pandemia, en especial a los grupos de población más vulnerables, como los adolescentes, con menos experiencia y herramientas para enfrentarse a una experiencia tan traumática e inesperada como una pandemia. Desde nuestra propia experiencia, en el Centro Hope hemos observado un significativo incremento de las consultas tanto psicológicas como psiquiátricas, tanto de adultos como especialmente entre los más jóvenes y de forma online. El cierre de los colegios e institutos, la cancelación de exámenes finales, o el confinamiento han provocado la aparición de trastornos del sueño, irritabilidad, cambios en el peso, crisis de ansiedad, pérdida del sentido de vida nerviosismo y estrés, que no solamente hemos detectado desde nuestro centro, sino que también se reflejan en los datos recogidos por la plataforma de Asociaciones de Psiquiatría y Psicología Clínica por la Salud Mental de la Infancia y Adolescencia de España. Además, la interrupción de las rutinas diarias, la imposibilidad de descargar energía física debido al confinamiento o la interrupción temporal de la relación con los compañeros, han provocado secuelas psicológicas mucho más graves en los niños y adolescentes que en los adultos. Secuelas que, desafortunadamente, continúan hoy en día.

"El 52,2% de los padres que han convivido con sus hijos menores ha percibido cambios en su forma de ser."

Lo cierto es que, aunque las cifras de contagio siguen disminuyendo, la pandemia de la Covid-19 todavía está lejos de terminarse. Una vez consigamos vencer al virus, tendremos que combatir sus consecuencias, y en especial, los problemas de salud mental. Desde el confinamiento nos hemos encontrado con muchas personas que nos contactaban a través de nuestra web desde todas partes de España. Y en este sentido, las soluciones que nos proporciona el Grupo QDQ en cuanto a la optimización de nuestra web o el posicionamiento SEO, nos han permitido llegar a personas de todos los puntos de nuestro país y ayudarles a combatir las consecuencias mentales de esta tan atípica situación. Además, un hecho sorprendente para nosotros ha sido encontrarnos con que, tanto nuestros pacientes adultos y como jóvenes, han abrazado el uso de las nuevas tecnologías, como las video-llamadas, etc.

"Una vez consigamos vencer al virus, tendremos que combatir sus consecuencias, y en especial, los problemas de salud mental".

Centro Hope en esta pandemia ha aportado su granito de arena, ofreciendo los servicios de Psiquiatría, Coaching y Psicoterapia Integrativa para todas las edades, así como terapia de pareja y de familia, arte terapia, terapia del juego y nuestros cursos on-line de crecimiento personal y de pareja, entre otros.