Alliance Healthcare ha anunciado que ha sido adjudicataria, por parte del Ministerio de Sanidad, de los lotes referentes a mascarillas contemplados en el Acuerdo Marco para la adquisición del material necesario para hacer frente al Covid-19. Este acuerdo y la correspondiente tramitación de la licitación han sido la única opción posible para conseguir, en un corto espacio de tiempo, que el Sistema Nacional de Salud disponga del material necesario para hacer frente a cualquier eventualidad en relación con Covid-19.

Realizada a través del Instituto Nacional de Gestión (INGESA), los dos lotes adjudicados a Alliance Healthcare ascenderían a 250 millones de unidades de mascarillas quirúrgicas y mascarillas FPP2. Las mascarillas FPP2 que se suministrarán son de la empresa española proveedora de EPIs especializada en mascarillas, Star Care. Los productos de Star Care cumplen todos los estándares oficiales de homologación y están testados y probados por empresas europeas. Estás mascarillas que cuentan con un 98% de eficacia de filtración de aerosoles de partículas como las de la Covid-19, están al alcance de toda la población, ya que la compañía las distribuye desde agosto a sus farmacias.

Remedios Parra, manufacturers and pharmacies director de Alliance Healthcare, ha manifestado que “en Alliance Healthcare vivimos con una enorme responsabilidad el hecho de contribuir a agilizar las actuaciones realizadas por el Ministerio de Sanidad para el abordaje de la crisis provocada por el virus SARS-CoV-2, facilitando los suministros. Asimismo, desde el inicio de la crisis nos hemos comprometido a proveer a las farmacias del mejor material sanitario para sus pacientes, por eso realizamos un suministro seguro y continuado de las mascarillas FFP2 Star Care, y seguiremos haciéndolo también en 2021”.

Se trata de la mayor compra de materiales centralizada llevada a cabo por la Administración española, e involucra a las áreas sanitarias de Ceuta y Melilla y todas las Comunidades Autónomas, a excepción de la Comunidad Valenciana. Con este proceso las autoridades sanitarias buscan optimizar la gestión, evitando que se inicien procesos de licitación en cada ocasión en que haya necesidad de los mencionados productos sanitarios y, por tanto, se precise su suministro.