El prototipo, basado en un virus del resfriado, es uno de los más avanzados del mundo.
NOTICIAS RELACIONADAS
Vacuna nasal contra la COVID-19, ¿una realidad cercana?
¿Cómo está evolucionando la variante ómicron en España?
Los contagios de la COVID-19 se reducen un 76% en todo el mundo
China, continúa dando pasos de gigante en la carrera mundial para desarrollar una vacuna eficaz contra el Covid-19. Recientemente, ha dado un paso más al aprobar, por primera vez, una de ellas para uso de forma exclusiva en sus fuerzas militares.
Se trata de la vacuna que desarrolla el Instituto Científico Militar y la compañía biofarmacéutica china CanSino Biologics, que ya superó las dos primeras fases de ensayos clínicos, que incluyen las primeras pruebas con humanos, pero que aún debe pasar la tercera, que requiere que sea testada en grupos de personas mucho más amplios.
Un equipo dirigido por Chen Wei, investigador de la Academia, descubrió el primer anticuerpo monoclonal neutralizante altamente eficiente y los resultados de ese estudio fueron publicados por la revista Science el pasado 22 de junio.
Así, el proyecto de CanSino se une a las vacunas experimentales en fase de desarrollo más avanzada, como la de la Universidad de Oxford, la del laboratorio estadounidense Moderna y la de la también empresa china Sinopharm, todas ellas con pruebas en grandes grupos humanos ya en marcha.
Según fuentes de la compañía, "la vacuna se encuentra limitada actualmente solo a uso militar y no puede tener mayor alcance sin la aprobación de el Departamento de Apoyo Logístico". La vacuna experimental utiliza otro virus -un adenovirus del resfriado común- para introducir en las células humanas información genética del nuevo coronavirus con las instrucciones para fabricar solo algunas de sus proteínas virales y generar una respuesta inmune sin riesgo de padecer la enfermedad.