Los trastornos de la conducta alimentaria son desórdenes mentales con graves consecuencias para la salud física y psicológica de las personas que los padecen y para sus familiares. En España, 400.000 personas tienen un TCA y se espera que esta cantidad aumente un 12 % en los próximos 12 años, según FITA Fundación.

Los principales trastornos de la conducta alimentaria son la anorexia, la bulimia y el trastorno por atracón, que padecen 1 de cada 20 adolescentes españoles, indican los datos de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG). Tienen en común la alteración del peso, la obsesión por la imagen corporal y la dieta, pero tras todo esto la persona que sufre un TCA tiene un gran malestar emocional.

La salud mental ha sido un tema recurrente en medios, conferencias y encuentros, un hecho que ha facilitado que la sociedad tenga un mayor conocimiento de esta problemática social. No obstante, el estigma y las falsas creencias se mantienen.

Romper estigmas

Nana, Leia, Julia, Eloy, Alexia, y Laura, pacientes que llevan su tratamiento especializado en TCA en uno de los centros de Ita, relatan sus vivencias en El Libro de Microestigmas, un proyecto creado por la Cátedra contra el Estigma de la UCM-Grupo 5 e ilustrado por la artista Dommcobb. Su objetivo es romper estigmas y acercar la realidad con la que conviven las personas con algún problema de salud mental: en este caso, un trastorno alimentario.

Los pacientes de Ita relatan su historia en un libro que pretende concienciar sobre el estigma social y que quiere erradicar comentarios como "sonríe, que la vida es bella y ser feliz es fácil", "si quisieras, ya estarías bien". De hecho, escuchan frases similares a diario y, aunque algunas parezcan positivas, no lo son. Así, ciertos comentarios ponen la carga en la persona y no en su sufrimiento sin que los demás lo sepan.

Petición de los pacientes

Por consiguiente, los pacientes de Ita han utilizado este soporte para hacer una petición: les gustaría que "la gente esté informada", ya que no realizarían ciertos comentarios "si supiesen lo que es estar ingresado, pasar tu adolescencia metido en un hospital nueve horas al día, perdiéndote planes, etcétera".

"Los trastornos alimentarios son un intento fallido de resolver algún problema emocional que nada tiene que ver ni con la comida ni el cuerpo. El síntoma se convierte en su solución al malestar emocional y el reto del tratamiento es dar respuesta a aquellos conflictos internos que pueden ser de muchas índoles: post traumáticos, conflictos familiares no resueltos, rasgos de personalidad que generan sufrimiento...", explica Diego Solano, director de los centros especializados en TCA de Ita Sevilla y gerente de área de Salud Mental de Andalucía y Extremadura de Korian. "De ahí la importancia del trabajo interdisciplinar que ayuden a encontrar respuestas al sufrimiento", añade.