La Fundación Manantial ha puesto en marcha el proyecto #Rayadas con el objetivo de cuidar la salud y el bienestar mental de las personas jóvenes en el entorno educativo, proporcionándoles información de calidad y herramientas. El resultado final de este trabajo es una campaña de sensibilización creada por ellos mismos para convertirse en altavoces y llegar a otras personas jóvenes, con sus propias palabras y en sus propios canales.

Según una encuesta realizada a 40.000 adolescentes por Unicef España y la Universidad de Santiago para el estudio sobre el impacto de la tecnología en la adolescencia, las tentativas de suicidio en menores se sitúan en el 10,8%. Además, la prevalencia de malestar emocional en la población adolescente se sitúa entre el 20% y el 38%. La pandemia ha supuesto un aumento muy significativo de cuadros de ansiedad (27%), depresión (15%) y de expresiones de malestar intenso como las autolesiones (el 40% de los ingresos hospitalarios en psiquiatría tienen este motivo).

La prevalencia de malestar emocional en la población adolescente se sitúa entre el 20% y el 38%.

Más allá de las manifestaciones clínicas, también se han extendido las percepciones de falta de motivación para realizar actividades, pesimismo frente al futuro y sensación de falta de sentido o propósito. La investigación indica que, a pesar de estos datos, más del 40% de las personas jóvenes que han sentido malestar emocional no han pedido ayuda a servicios especializados.

Más del 40% de las personas jóvenes que han sentido malestar emocional no han pedido ayuda a servicios especializados.

Educación en las aulas 

El ámbito educativo es clave para intervenir en esta situación. Por eso, a través del proyecto #Rayadas se ha realizado un trabajo de sensibilización e intervención en las aulas, contando y promoviendo la participación de adolescentes, para acercar y adaptar las estrategias de prevención y atención a su realidad y necesidades.

En esta experiencia piloto, profesionales de Fundación Manantial han intervenido en dos institutos de Madrid con 150 alumnos, con los que han  salud mental, cómo cuidarla, los riesgos de las redes sociales y cómo distinguir la información veraz en las distintas plataformas que utilizan.

“Esta campaña es un paso más para poder seguir concienciando sobre los problemas de salud mental de este país y, en concreto, de la población adolescente que cada vez es más necesario atender".

Pablo Roca, psicólogo y creador de Occimorons.

El resultado final de este trabajo es una campaña de sensibilización en Tik Tok creada por ellos mismos para convertirse en altavoces y llegar a otras personas jóvenes, con sus propias palabras y en sus propios canales. La campaña ha sido presentada en CaixaForum de Madrid de la mano de Nuria Labari, escritora y periodista, y Pablo Roca, más conocido en redes sociales como Occiomorons. En palabras de Sara Toledano, directora del Área Técnica y de Innovación de Fundación Manantial, “esta campaña es un paso más para poder seguir concienciando sobre los problemas de salud mental de este país y, en concreto, de la población adolescente que cada vez es más necesario atender. Con #Rayadas buscamos conocer su situación e implicarles en transmitir a sus iguales que el cuidado la salud mental es un tema relevante”.

"Con #Rayadas buscamos conocer su situación e implicarles en transmitir a sus iguales que el cuidado la salud mental es un tema relevante”.

Las redes sociales como fuente de información

Para poder llegar a la gente joven es necesario utilizar los canales que ellos utilizan y, en este caso, las nuevas tecnologías juegan un papel muy importante. Según un estudio de Unicef, el 90,8% de las personas entre 12 y 18 años se conectan todos o casi todos los días a las redes sociales. El 98,5% de los adolescentes está registrado en alguna red social siendo TikTok una de las redes más usadas (75,3%).  Aunque no se pueda establecer una relación causa efecto, los niveles de bienestar emocional, integración social y satisfacción con la vida son siempre inferiores entre los adolescentes que presentan un uso problemático de internet, incluyendo la tasa de depresión, que es más del triple.

El 25% de la población adolescente reconoce haber puesto en duda en alguna ocasión aquello que le contaban sus profesores en el colegio o en el instituto por el consumo de desinformación en redes sociales. Asimismo, el 33% de las personas encuestadas reconoce haber tenido enfrentamientos o discusiones con sus amigos o familiares como consecuencia de los bulos o información errónea.

El 33% de las personas encuestadas reconoce haber tenido enfrentamientos o discusiones con sus amigos o familiares como consecuencia de los bulos o información errónea.

En este sentido, Nuria Labari afirma que “las redes sociales son un canal de comunicación imprescindible para llegar a otras personas jóvenes que puedan necesitar ayuda.  El uso de la tecnología supone un aporte trascendental tanto a nivel social como emocional para un adolescente. Les ayuda a hacer amigos, a no sentirse solos y encuentran a través de ella alegría, diversión, apoyo, comprensión y bienestar emocional”.

Por su parte, Occiomorons afirma que “El apoyo social que la población adolescente encuentra en las redes sociales es crucial para el desarrollo de sus emociones. Es importante que aprendan a hacer un uso controlado de las mismas y, para ello, necesitan que les demos las herramientas necesarias para que las redes sociales les aporten el bienestar mental que necesitan”.

“El apoyo social que la población adolescente encuentra en las redes sociales es crucial para el desarrollo de sus emociones".

El sistema educativo es clave en la transformación hacia una educación crítica y en el aprendizaje de las herramientas y pautas necesarias para manejarse de modo “saludable” en Internet. Por ello, el proyecto #Rayadas pretende involucrar a la comunidad educativa para diseñar conjuntamente el desarrollo del proyecto en colaboración con orientadores, tutores y profesores.  Analizando, en conjunto, cuál es el punto de partida de la comunidad educativa con respecto a la salud mental del alumnado y proponer indicadores para evaluar su evolución y los resultados del proyecto.

“#Rayadas supone un punto de partida para seguir trabajando en mejorar la salud mental de la población adolescente y darles las herramientas necesarias para pedir ayuda cuando lo necesiten, con el fin de reducir drásticamente las cifras de suicidio en nuestro país”, concluye Sara Toledano.