RSC29 de agosto, 2023
La Fundación Merck Salud y la Fundación Feder impulsan el estudio de nuevos tratamientos para el lupus erimatoso sistémico
Ambas entidades promueven la investigación para ofrecer tratamientos personalizados a personas con enfermedades raras.
NOTICIAS RELACIONADAS
La SEFH organiza la jornada EnFHocando juntos nuevos retos en la atención de enfermedades raras
Uso de tecnologías disruptivas para facilitar el ejercicio del derecho a la salud
Feder y Farmaindustria impulsarán el conocimiento sobre las enfermedades raras
La Fundación Merck Salud y la Fundación Feder han galardonado con la Ayuda en materia de Investigación Clínica en Enfermedades Raras 2023 el proyecto "Diseño de terapias celulares basadas en péptidos DNA miméticos para el tratamiento de pacientes de lupus eritematoso sistémico" liderado por la doctora Laura Belver y su equipo, del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras.
De esta forma, ambas fundaciones impulsan la la investigación clínica en enfermedades poco frecuentes desempeñando un papel fundamental en el ámbito del tratamiento de estas patologías, ya que impulsa mejoras significativas en la calidad de vida de los pacientes afectados por estas patologías.
“Nos llena de satisfacción saber que estamos abriendo un nuevo camino de esperanza para las familias que conviven con enfermedades raras”.
“Nos llena de satisfacción saber que estamos abriendo un nuevo camino de esperanza para las familias que conviven con enfermedades raras”, ha apuntado Carmen González Madrid, presidenta de Fundación Merck Salud.
En esta II convocatoria en materia de Investigación Clínica en Enfermedades Raras 2023 ambas entidades han premiado al estudio para el tratamiento de pacientes de lupus eritematoso sistémico (LES). El lupus eritematoso sistémico es una enfermedad autoinmune rara que presenta una amplia gama de manifestaciones, pudiendo afectar a diversos órganos y sistemas, tales como la piel, las articulaciones, el sistema nervioso central o los riñones.
"Los tratamientos actuales para el lupus disminuyen la actividad de todo el sistema inmunológico, lo que reduce los síntomas de la enfermedad, pero aumenta el riesgo de sufrir infecciones”.
“Uno de los principales desafíos para tratar las enfermedades autoinmunes es la falta de terapias que puedan bloquear específicamente la actividad de los linfocitos B que nos atacan sin afectar la función de los que nos protegen. Los tratamientos actuales para el lupus disminuyen la actividad de todo el sistema inmunológico, lo que reduce los síntomas de la enfermedad, pero aumenta el riesgo de sufrir infecciones”, ha señalado la doctora Belver.
Asímismo, la doctora ha señalado que el objetivo de este proyecto es “desarrollar una nueva terapia que nos permita eliminar específica y únicamente a los linfocitos B patogénicos que producen daños en los órganos y tejidos de los pacientes de lupus. Para ello utilizaremos la tecnología de receptores quiméricos de linfocitos T que está siendo ya aplicada con éxito para el tratamiento de distintos tipos de cáncer hematológico”, ha concluido la doctora Belver.