Tecnología22 de marzo, 2023
Las tres claves de la IA en salud: medicina personalizada, responsabilidad médico-sanitaria y transformación
Una monografía de la Fundación Merck analiza los aspectos vitales de esta tecnología aplicados a los sistemas sanitarios
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El impacto transformador de la IA en la optimización de la atención médica
El carácter interdisciplinar y la transversalidad de la Inteligencia Artificial (IA) han hecho que este tipo de ciencia sea, hoy en día, una herramienta esencial para la construcción de un futuro más competitivo y eficaz. Su uso en la medicina y en las ciencias de salud es imprescindible ya que, gracias a ella, se estrechan los pasos hacia la nueva medicina 5P: más preventiva, participativa, personalizada, predictiva y poblacional.
“Gracias a la Inteligencia Artificial, avanzamos en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades, pero también en desarrollar nuevos medicamentos y mejorar la vida de los pacientes de una manera más eficiente”, afirma Carmen González Madrid, presidenta de Fundación Merck Salud.
“Gracias a la Inteligencia Artificial, avanzamos en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades, pero también en desarrollar nuevos medicamentos y mejorar la vida de los pacientes".
En la monografía "Inteligencia Artificial en el campo de la Salud" Fundación Merck Salud se dilucidan tres claves esenciales a la hora de aplicar de forma eficaz la IA en beneficio de la salud de la sociedad. La responsabilidad médico-sanitaria, la utilización de la IA en el diagnóstico y medicina personalizada del ámbito oncológico y la transformación del sistema sanitario, son tres elementos clave en este aspecto.
Tres claves de la IA en la salud
Estas son las tres claves de la IA aplicadas a la salud según la citada monografía:
Uso en diagnóstico y medicina personalizada en el ámbito oncológico
En un futuro próximo, los avances realizados hasta ahora, junto con nuevos progresos realizados en cuanto a los cambios mutacionales asociados a tratamientos, tendrán que dar paso a la implementación de la IA en la práctica clínica para ayudar en la toma de decisiones diagnósticas y terapéuticas de los pacientes con cáncer. Se está ya viendo en estos momentos las posibilidades que este tipo de metodologías están abriendo en esta área.
Responsabilidad médico-sanitaria
Las ventajas que presenta la IA, deben contrapesarse con la afectación a los derechos individuales. Así, en la obra publicada por Fundación Merck Salud, se concluye que la metodología del compliance, en cuanto orientación preventiva basada en la evaluación a priori y en un seguimiento dinámico, puede ser una vía adecuada para prevenir los casos de responsabilidad médica por la utilización de la IA.
Las ventajas que presenta la IA, deben contrapesarse con la afectación a los derechos individuales.
La normativa sobre daños por productos defectuosos, tanto europea como española, y la regulación en materia de responsabilidad civil, resultan insuficientes para garantizar la adecuada cobertura de la responsabilidad por los daños que se causen a los pacientes a raíz de la asistencia sanitaria mediante sistemas de IA. En este sentido, como apunta la Comisión Europea, el legislador europeo y nacional deberán afrontar modificaciones para contemplar esta nueva realidad.
Transformación del sistema sanitario
El rápido desarrollo de la IA en el mundo actual en todos los sectores y, especialmente, en el de la Salud en general y en los sistemas sanitarios en particular, está planteando múltiples preguntas. Y es que como se explica en la monografía de Fundación Merck Salud, todavía falta en sistemas sanitarios avanzados como el nuestro una adecuada tecnología de la información (TI), es decir, una infraestructura que conecte todas las partes interesadas y les facilite la interoperabilidad haciendo que fluya la información.
Necesitamos una infraestructura de TI abierta y su papel irrenunciable como soporte central de la gran variedad de datos provenientes de las tecnologías sanitarias existentes y las que vendrán.
Una infraestructura de estas características ha de tener una visión abierta para la gestión de los datos, independientemente de todos los permisos y salvaguardas necesarias que nunca se sustituirán por las numerosas interfaces de programación existentes entre aplicaciones. Modelos que permitan el flujo de los datos clínicos son esenciales y son los precursores de la Salud participativa, por lo que necesitamos una infraestructura de TI abierta y su papel irrenunciable como soporte central de la gran variedad de datos provenientes de las tecnologías sanitarias existentes y las que vendrán.