Política sanitaria4 de abril, 2022
Situación de la pandemia en España: incidencia, vacunación, variante predominante y escenarios futuros
El linaje BA.2 de ómicron es en la actualidad el predominante en nuestro país.
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Tras la nueva forma de contabilizar después de que la semana pasada entrara en vigor la nueva estrategia de vigilancia frente a la COVID-19, los casos notificados a fecha 1 de abril de 2022, suman un total de 43.265. De estos, 14.809 son personas mayores de 60 años, y se han comunicado un total de 323 fallecimientos.
Así pues, mientras no haya modificaciones, los casos notificados a partir de ahora se refieren a individuos con criterios de vulnerabilidad o relacionados con ámbitos vulnerables y los que necesitan ingreso hospitalario. De este modo, ya no se informa del total de los infectados por SARS-Cov-2.
También se ha cambiado la manera de contar la incidencia, de modo que ahora solo se va a mostrar la de los mayores de 60 años. Por el momento, esta se sitúa en 459,27 en los últimos 14 días por 100.000. Asimismo, en las dos semanas anteriores se ha registrado un total de 56.573 positivos en este grupo de edad.
Desde el inicio de la pandemia, se han contagiado 11.551.574 de personas en nuestro país, según los datos oficiales.
Desde el inicio de la pandemia, se han contagiado 11.551.574 de personas en nuestro país, según los datos oficiales. Hasta 102.541 personas con prueba diagnóstica positiva han fallecido desde que el virus llegó a España, y en la última semana la cifra de fallecidos ha ascendido a 171 personas con positivo.
En cuanto a los ingresados por COVID-19, las últimas informaciones hablan de 4.150 pacientes ingresados en toda España (4.351 el martes de la semana pasada) y 420 en UCI (492 el martes de la semana pasada).
El total de dosis de vacunas administradas en nuestro país es de 93.807.121.
El total de dosis de vacunas administradas en el país es de 93.807.121, mientras que 38.969.612 de personas ya tienen la pauta completa.
Ómicron y sus linajes
Tal y como se expone en el documento “Variantes de SARS-CoV-2 en España: linaje BA.2 de Ómicron. Evaluación rápida de riesgo”, del Ministerio de Sanidad, “la situación actual en nuestro país se caracteriza por un descenso de la incidencia tras haber alcanzado los valores máximos desde el inicio de la pandemia”. Esta bajada ha coincidido con un progresivo aumento de la frecuencia porcentual del linaje BA.2 de ómicron con el consiguiente descenso en la proporción del linaje BA.1.
El nivel de inmunidad en la población frente a enfermedad grave se considera muy alto debido tanto a la elevada incidencia acumulada desde el inicio de la pandemia.
El nivel de inmunidad en la población frente a enfermedad grave se considera muy alto debido tanto a la elevada incidencia acumulada desde el inicio de la pandemia, como a las altas coberturas de vacunación en el momento actual (>90% de la población mayor de 12 años con pauta completa y >90% de la población mayor o igual a 60 años con dosis de refuerzo) (3). Además, la eficacia vacunal frente a hospitalización y defunción se mantiene en niveles cercanos al 90%.
Se ha detectado es que por el momento la variante predominante en España es ómicron, y el linaje BA.2 es el más abudante.
Lo que se ha detectado es que por el momento la variante predominante en España es ómicron. Con respecto a sus linajes BA.1, BA.1.1 o BA.3, de acuerdo con los datos de secuenciación y PCR específica, se ha comprobado que el linaje BA.2 es el más abudante.
Ómicron comprende los linajes BA.1, BA.1.1, BA.2 y BA.3, y presenta un alto número de mutaciones. Muchas de ellas, estaban presentes en otras variaciones de este coranovirus ya detectadas previamente y algunas que se han relacionado con un aumento de la transmisibilidad o con un cierto grado de escape a la respuesta inmune. Actulamente, se la considera como una variante de mayor impacto para la salud pública (VOC), es decir, aquellas que son más transmisibles, más virulentas o que pueden escapar, total o parcialmente, al efecto de los anticuerpos adquiridos tras la infección natural o la vacunación con variantes previas.
BA.1 fue el linaje mayoritario durante una primera fase de expansión de ómicron y, por lo tanto, las características descritas para la variante se corresponden con las de este linaje. BA.1.1, deriva de BA.1 y presenta una mutación añadida en el gen de la espícula.
Por el momento, no se han detectado diferencias en el riesgo de hospitalización entre BA.1 y BA.2.
Por otro lado, BA.2 es el linaje de ómicron que más diferencias presenta respecto a BA.1 y su frecuencia ha ido aumentando hasta convertirse en el linaje predominante a nivel global.
Por el momento, no se han detectado diferencias en el riesgo de hospitalización entre BA.1 y BA.2. Los primeros estudios de efectividad vacunal tampoco han hallado diferencias entre ambos linajes.
La delta prevaleció hasta diciembre de 2021, y finalmente ha sido desplazada por ómicron. Siguiendo los datos de secuenciación asociados a muestreos aleatorios, el resto de variantes del virus se mantienen en niveles muy bajos de circulación. En las últimas cuatro semanas analizadas las otras mutaciones, en conjunto, alcanzan el 0,4% del total.
Un virus estacional
En el marco del Encuentro Europeo de la Farmacia celebrado el pasado mes de marzo en Madrid, Luis Enjuanes, jefe del Laboratorio de Coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, corroboró que efectivamente ómicron se está imponiendo y también se ha demostrado que “es más atenuada que las anteriores, pero aún puede causar ciertas patologías y muchos ingresos hospitalarios y muertes. Las patologías son más suaves por dos motivos: la población está más inmunizada por las vacunas y el virus se ha atenuado”.
"El próximo invierno tendremos otra ola, pero teniendo a la población vacunada será como una gripe fuerte".
Enjuanes advirtió que “el virus ha venido para quedarse, será estacional. El próximo invierno tendremos otra ola, pero teniendo a la población vacunada será como una gripe fuerte. Lo previsible es que al ser un virus más suave su gravedad sea menor y mantenga esa tendencia. Conocemos siete coronavirus humanos, cuatro de ellos leves, que han evolucionado atenuándose, y tres más graves”.
“La vacuna en medicina supone la mejor relación inversión-beneficio”.
Además, el virólogo insistió en que “la protección frente a las epidemias virales tiene muchas vertientes, pero la prevención mediante la vacunación es una de las más eficaces, probablemente seguida por el tratamiento con antivirales”. En este sentido, ha agregado que “la vacuna en medicina supone la mejor relación inversión-beneficio”.
¿Qué dice la OMS?
El miércoles de la semana pasada, la Organización Mundial de la Salud (OMS), publicó su tercera actualización del Plan Estratégico de Preparación, Preparación y Respuesta para el COVID-19. En dicho informe se habla de tres posibles evoluciones del coronavirus SARS-CoV-2.
El escenario más probable según el doctor Tedros Adhanom Gebreysus, director de la Organización, es que este coronavirus virus siga mutando, pero que genere una enfermedad menos grave a medida que vaya aumentando la inmunidad debido a la vacunación y el número de infectados.
Otra posibilidad es que surjan nuevas variantes que no sean tan graves y para las que no sea necesario una dosis de refuerzo o nuevas vacunas. Y, la última, sería la aparición de una alteración de SARS-CoV-2 más virulenta y con una gran capacidad de transmisión, lo que nos llevaría de nuevo a una situación complicada ya que la protección frente a la misma disminuiría.
Vacunar al 70% de la población de cada país “sigue siendo esencial para controlar la pandemia, priorizando a los trabajadores sanitarios, a las personas mayores y a otros grupos de riesgo”.
Ante esta realidad, la OMS propone estas cinco actuaciones:
- Mantener la vigilancia, el trabajo de los laboratorios y la recopilación de información de salud pública.
- Vacunar, continuar con las medidas sociales y de salud pública, y sostener el compromiso de las comunidades.
- Ofrecer atención clínica para el COVID-19, e invertir en sistemas de salud resistentes.
- Avanzar en la investigación y el acceso equitativo a las herramientas y los suministros.
- Una coordinación a medida que la respuesta pasa del modo de emergencia a la gestión de la enfermedad respiratoria a largo plazo.
Del mismo modo, desde este organismo aseguran que vacunar al 70% de la población de cada país “sigue siendo esencial para controlar la pandemia, priorizando a los trabajadores sanitarios, a las personas mayores y a otros grupos de riesgo”.