La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) ha anunciado que el año 2022 será el año de los Cuidados Respiratorios Intermedios, y como coordinadora de todas las acciones ha designado a la neumóloga Olga Mediano. En una entrevista concedida a Pharma Market nos ha desvelado las acciones que se van a llevar entorno a este asunto y sus impresiones sobre la situación actual de la pandemia.

UCRI

La experta ha resaltado el protagonismo que este año han tenido las Unidades de Cuidados Respiratorios Intermedios (UCRI): “Han sido tremendamente útiles a la hora de salvar vidas, pues han puesto a disposición de los enfermos unos sistemas de respiración, el soporte de respiración no invasivo, que han resultado fundamentales en los momentos de más desabastecimiento y de imposibilidad de mayor ocupación de camas de UCI”.

"Las UCRI han sido tremendamente útiles a la hora de salvar vidas en el caso de pacienetes con la COVID-19".

Por este motivo, desde la Separ se quiere dar a conocer a la población la labor que han desarrollado los neumólogos en las UCRI salvando vidas, pero también se van a centrar en potenciar la formación de todos los profesionales que trabajan en estas unidades. “Estas no solo están formadas por neumólogos,  está la enfermería respiratoria o los fisioterapeutas y al final se desempeña un trabajo multidisciplinar con anestesistas y en combinación con los cuidados intensivos. Queremos que esta formación se materialice en una ACE, un Área de Capacitación específica, porque creemos que es lo necesario para asegurar la formación en estas unidades”.

De manera paralela, Olga Mediano ha anunciado que la sociedad científica va realizar una acción solidaria. En concreto, va a ayudar a establecer una UCRI en un país en desarrollo que lo necesite. Y además se va a preparar un congreso específico de Cuidados Respiratorios Intermedios, que está previsto para el mes de septiembre.

Situación en los hospitales

En lo relativo a la situación de las UCRI en los hospitales públicos de España, la neumóloga ha destacado que tras realizar un estudio de estas, lo que más llama la atención es la gran heterogeneidad que presentan. “Nuestro lema es #ningunhospitalsinucri y lo que queremos es que todo paciente pueda tener acceso a un tratamiento con un soporte respiratorio no invasivo si tiene un problema de este tipo”.

Con la situación actual muchas de estas unidades ya han vuelto a un uso normal, y algunas se han podido cerrar. Sin embargo, la doctora Mediano ha matizado que no son solo para pacientes con COVID-19, y es por ello que en la actualidad permanece lo que se denomina la UCRI limpia que está orientada a personas con otras patologías respiratorias, y que realmente ya existían.

“Nuestro lema es #ningunhospitalsinucri y lo que queremos es que todo paciente pueda tener acceso a un tratamiento con un soporte respiratorio no invasivo si tiene un problema de este tipo”.

La experiencia del Hospital Universitario de Guadalajara

Al mismo tiempo, la neumóloga ha contado cómo fue la adaptación en el Hospital Universitario de Guadalajara, uno de los primeros en adaptar la UCRI a la situación pandémica. En este caso, tuvo mucho que ver el Grupo de Ventilación Mecánica de Separ que mantenía una comunicación constante y que a su vez mantenía contacto con profesionales de otros países como por ejemplo de Italia, desde donde ya se comentaba lo importante que iba a ser la oxigenoterapia de alto flujo y el soporte respiratorio no invasivo.

“Esta información nos hizo reaccionar de forma rápida. Del mismo modo, hay que agradecer a la dirección del hospital que se dejó aconsejar y nos apoyó desde el inicio para realizar unas pequeñas obras antes incluso de que llegaran los pacientes. Eso nos permitió tener oxígeno directo a la pared y que se facilitara esos grandes flujos que necesitaba el paciente y que no se lo robaran de un paciente a otro, según estaba hecha antes la instalación. El poder aislar esa planta y que fuera una UCRI cerrada, que los profesionales tuvieran su lugar para cambiarse y para desinfectarse y el contar con un ratio adecuado tanto de personal médico como de enfermería e incorporar el fisioterapeuta, fueron factores clave”.

Seguridad y documento de consenso

Olga Mediano asegura que, al principio, cuando el desconocimiento de la COVID-19 era mayor se llegó a pensar que este sistema no era adecuado para abordarlo. “El problema del soporte respiratorio no invasivo es que genera aerosoles y los pacientes portan válvulas espiratorias con fuga alrededor de la mascarilla, que hacen que el virus salga y constituya un mayor para el riesgo para el profesional”.

“Desde Separ se hizo un documento de consenso en marzo de 2020 sobre cómo tratar con soporte respiratorio no invasivo al paciente con coronavirus. Aquí explicamos cómo tiene que trabajar el profesional y  lo cierto es que sirvió. En nuestro servicio, por ejemplo, no hubo contagios entre los neumólogos y muy escasos en enfermería. Ahora ya sabemos cómo protegernos pero en aquel momento hubo que hacer un poco de presión”.

“El problema del soporte respiratorio no invasivo es que genera aerosoles y los pacientes portan válvulas espiratorias con fuga alrededor de la mascarilla, que hacen que el virus salga y constituya un mayor para el riesgo para el profesional”.

Tercera dosis en pacientes con patologías respiratorias

En cuanto a la insistencia de la Sociedad por poner una tercera dosis de la vacuna contra la COVID-19 a las personas con patologías respiratorias, Olga Mediano la justifica porque quienes padecen ciertas enfermedades como Epoc, hipertensión pulmonar, asma grave, enfermedad intersticial, etc., pertenecen a grupos de pacientes que tienen más riesgo de tener una enfermedad grave por coronavirus. “Lo cierto es que nunca hemos entendido por qué no se les ha metido en ese grupo sobre todo porque para la vacuna de la gripe sí que se considera a estos pacientes”.

En lo referente al aumento de contagios que ya comienza a experimentarse en España, la doctora asegura que realmente nuestro país se halla en una situación excepcional por la alta tasa de vacunación de la población y, sobre todo, en mayores de 65 años y pacientes con patología de riesgo. El no haber retirado la mascarilla en interiores ha influido igualmente, y todo esto es lo que nos ha diferenciado del resto de Europa.

“Yo no creo que estemos en una sexta ola al no haber un incremento exponencial de casos y actualmente solo hay un ligero impacto en hospitales y UCIS.  Eso sí, tenemos que mantener las medidas de precaución y sobre todo no cantar victoria antes de tiempo”.

En el caso de que llegue una sexta ola, la doctora vaticina que será diferente a las ya pasadas: “Vamos a tener dos grupos, por un lado los casi 4 millones de personas que no se han querido vacunar y, por otro, los menores de 12 años, por lo que yo creo que va a ser una ola absolutamente distinta”.

Pero, ¿cuál es la clave para evitar ese incremento de casos? Según asevera la experta en neumología, la clave está en los espacios cerrados. Por eso, sobre todo de cara al invierno, Mediano sugiere mantener las medidas de prevención en estos lugares. Continuar con la mascarilla en interiores y el control de aforo cuando no se puede estar con ella como es el caso de los restaurantes.

“Vamos a tener dos grupos, por un lado los casi 4 millones de personas que no se han querido vacunar y, por otro, los menores de 12 años, por lo que yo creo que va a ser una ola absolutamente distinta”.

Divulgación científica

Por último, Olga Mediano destaca que lo más importante de su labor como divulgadora científica a lo largo de la pandemia ha sido no perder rigor científico a la par que informaba a la población general. “Hacer que la gente entienda ciertas cosas conlleva tener que estudiar y leer mucho. Se publica mucho, gran cantidad de noticias, y eso a veces sí que me ha llevado a ocupar un tiempo excesivo de mi vida e incluso dentro de mi familia. En año y medio he tenido que abandonar tareas que hacía con mis hijas como los deberes porque he estado mucho fuera de casa y lo poco que estaba en casa tenía que estar estudiando o leyendo o preparando o pensando cómo argumentar o pensar unos datos o una información o un mensaje… Al fin y al cabo el objetivo de la información era que la gente tuviera información precisa y que supieran cómo comportarse”.

“Hacer que la gente entienda ciertas cosas conlleva tener que estudiar y leer mucho. Se publica mucho, gran cantidad de noticias, y eso a veces sí que me ha llevado a ocupar un tiempo excesivo de mi vida e incluso dentro de mi familia".

Yo decidí que tenía que divulgar un día al salir del hospital por la tarde. Ya habían cerrado los colegios y sentía alivio por ello porque parecía que íbamos a mejor, sin embargo vi a todos los abuelos con los niños en los parques y es cuando fui consciente de que la gente no se estaba enterando de lo que estaba ocurriendo y que tenía que explicárselo. Llegué a casa y lancé mi primer video pidiendo que la gente se quedara en casa y a partir de ahí ha sido no parar durante un año y medio”.