A partir de la segunda mitad del siglo XX, la cirugía ha asumido un papel protagonista en la salud pública, pasando de ser un recurso extraordinario destinado al tratamiento de heridas, amputaciones, etc., a ser tratamiento de primera elección en múltiples enfermedades oncológicas, cardiovasculares o para mejorar la calidad de vida de pacientes con enfermedades crónicas como la artrosis.

"El número de intervenciones quirúrgicas en el mundo ha aumentado exponencialmente, superando en la actualidad los 300 millones casos anuales".

Desde entonces, el número de intervenciones quirúrgicas en el mundo ha aumentado exponencialmente, superando en la actualidad los 300 millones casos anuales, lo que supone una intervención quirúrgica por cada 25 habitantes/año. En los países desarrollados, la tasa de intervenciones quirúrgicas es mayor, llegando a uno por cada 10 habitantes/año. Así, en España se registran más de cinco millones de intervenciones quirúrgicas anuales, de las que aproximadamente un tercio precisan ingreso hospitalario durante al menos 24 horas.

"En España se registran más de cinco millones de intervenciones quirúrgicas anuales, de las que aproximadamente un tercio precisan ingreso hospitalario durante al menos 24 horas".

La tasa de mortalidad asociada a cirugía no se conoce con exactitud. Mientras que conocemos cuál es la tasa de mortalidad de procesos como el infarto de miocardio, los accidentes cerebrovasculares o la neumonía, la mortalidad perioperatoria no es un diagnóstico primario y su incidencia no es bien conocida.

"La tasa de mortalidad asociada a cirugía no se conoce con exactitud".

En el año 2017, el National Institute for Health Research Global Health Research Unit on Global Surgery estimó que más de cuatro millones de personas mueren anualmente en los 30 primeros días tras una intervención quirúrgica, lo que supone, en cifras absolutas, la tercera causa de muerte en el mundo tras el infarto de miocardio y los accidentes cerebrovasculares.

"A partir de datos obtenidos en 50.000 pacientes adultos sometidos a cirugía no cardiaca con ingreso en hospitales europeos, en el año 2011, publicó una mortalidad del 4% en los primeros 60 días de postoperatorio".

En Europa, el European Surgical Outcomes Study (Eusos), a partir de datos obtenidos en 50.000 pacientes adultos sometidos a cirugía no cardiaca con ingreso en hospitales europeos, en el año 2011, publicó una mortalidad del 4% en los primeros 60 días de postoperatorio.

"Aunque la cirugía tiene un gran potencial para curar y para ayudar a los pacientes, el enorme volumen de intervenciones quirúrgicas se asocia también a un gran número de fallecimientos en el periodo perioperatorio".

Aunque la cirugía tiene un gran potencial para curar y para ayudar a los pacientes, el enorme volumen de intervenciones quirúrgicas se asocia también a un gran número de fallecimientos en el periodo perioperatorio, lo que representa ya un problema de salud que, en el futuro próximo, no hará sino aumentar. El envejecimiento de la población provocará un mayor número de intervenciones quirúrgicas y éstas se realizarán en pacientes con mayor número de comorbilidades, lo que tendrá un enorme impacto en los resultados. 

"El envejecimiento de la población provocará un mayor número de intervenciones quirúrgicas y éstas se realizarán en pacientes con mayor número de comorbilidades, lo que tendrá un enorme impacto en los resultados". 

En estas circunstancias, la medicina perioperatoria se convierte en el reto de la moderna Anestesiología y Reanimación. El trabajo multidisciplinar con el resto de especialistas médicos y quirúrgicos centrará los esfuerzos e iniciativas en la identificación preoperatoria de aquellos pacientes con mayor riesgo, lo que resulta crucial para informarles adecuadamente, a ellos y a sus familias, para comunicarse entre equipos médicos, para formarse expectativas realistas del tratamiento quirúrgico y para llevar a cabo actuaciones selectivas dirigidas a reducir la tasa de complicaciones y la mortalidad perioperatoria. La implementación de estrategias de prehabilitación, monitorización y protección perioperatorias, así como de vigilancia, detección y tratamiento precoces de las complicaciones postoperatorias, mejorarán la experiencia del paciente quirúrgico y reducirán su morbi-mortalidad.