Política sanitaria13 de diciembre, 2023
Tratar la obesidad puede reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares
La coordinación entre las especialidades de endocrinología y nutrición, cardiología y atención primaria es clave.
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Bajo el lema 'Cuida tu peso, tu corazón lo merece', la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) y la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), con la colaboración de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) y la Asociación Bariátrica Híspalis Nacional (ABHíspalis) se han unido en el marco del Día de la Obesidad para concienciar sobre la importancia de reconocer la obesidad como enfermedad y como causa para el desarrollo de otras patologías con gran morbimortalidad, ya que su adecuado abordaje puede evitar la aparición de eventos cardiovasculares, enfermedades del hígado e incluso cánceres.
La doctora Ana de Hollanda, coordinadora del Área de Obesidad de la SEEN, ha lamentado que la obesidad siga siendo "la gran olvidada", a pesar de que esta patología tiene una prevalencia pandémica, ya que hasta casi el 50 % de la población padece sobrepeso u obesidad. En España, un 22 % de la población tiene esta enfermedad y, si permanece esta tendencia, se alcanzarán cifras del 37 % en 2035. En este sentido, el doctor Cristóbal Morales, vocal de la SEEDO, ha apuntado que es necesario alcanzar "un gran pacto nacional" frente a la obesidad, así como adoptar medidas preventivas en guarderías y colegios y llevar a cabo diagnósticos de precisión, tratamientos y seguimientos personalizados para cada paciente.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa de que el 80 % de las muertes prematuras por patologías cardiovasculares se podrían prevenir tratando factores de riesgo, empezando con el tratamiento y prevención de la obesidad y el abandono del tabaco o promoviendo hábitos de vida saludable. "Para prevenir y tratar las patologías cardiovasculares, lo principal es tratar el exceso de adiposidad", ha indicado el doctor Morales.
Tal y como reflejan los ensayos clínicos, es fundamental tomar conciencia de que la obesidad multiplica la probabilidad de sufrir un infarto, un ictus o una enfermedad coronaria periférica. En este sentido, datos recientes evidencian que con tratamientos específicos para la obesidad y hábitos saludables se puede reducir de manera considerable el riesgo de mortalidad por enfermedad cardiovascular. "Con la prevalencia tan elevada relacionada con las ECV y la obesidad, la cardiología es la una de las especialidades con las que más estrechamente se debe aunar esfuerzos para identificar estrategias efectivas de prevención, detección y tratamiento", ha indicado la doctora de Hollanda.
La SEC y la SEEN publicaron recientemente el documento 'Detección y manejo de la insuficiencia cardiaca en el paciente con obesidad' con el objetivo de facilitar el diagnóstico precoz de la insuficiencia cardiaca y su manejo en el paciente con obesidad. En este sentido, la doctora Almudena Castro, coordinadora del Grupo de Trabajo de Diabetes y Obesidad de la SEC, ha afirmado que "es necesario entender que la obesidad, específicamente la adiposidad, origina insuficiencia cardiaca, arritmias y enfermedad vascular. Por eso, tratarla es tratar también sus complicaciones. El papel de la grasa epicárdica es crucial en estas tres patologías y el cardiólogo debe entender este vínculo para implicarse en el tratamiento de la obesidad como una patología de nuestra especialidad para lograr darle el mayor beneficio a nuestros pacientes".
Abordaje multidisciplinar y coordinación entre especialidades
La SEEN considera que "existen grandes barreras para tratar la obesidad de manera eficaz". En este sentido, recuerda que los centros de atención primaria y una gran cantidad de hospitales carecen o no tienen una presencia suficiente de dietistas-nutricionistas en los servicios de endocrinología y nutrición que trabajen de manera coordinada ni psicólogos especializados en el abordaje de esta patología y expertos en actividad física. En esta línea, el doctor Morales ha destacado que un equipo multidisciplinar, compuesto por expertos en obesidad para afrontar sus complicaciones, es el único camino para el abordaje de "una enfermedad tan compleja".
Por su parte, la doctora de Hollanda ha remarcado que el endocrinólogo debe colaborar estrechamente con el equipo de Atención Primaria: "El médico de AP es el primer contacto de las personas con obesidad con el sistema sanitario y, por tanto, es prioritario establecer unos circuitos coordinados y consensuados entre AP y atención especializada para facilitar el tratamiento transversal de esta enfermedad".
La doctora Rosario Corio, del Grupo de Nutrición de Semergen, ha argumentado que el médico de familia es clave en la detección, valoración y seguimiento de las comorbilidades que padecen estos pacientes, así como su prevención y tratamiento, no sólo por su accesibilidad y conocimiento del entorno familiar con los múltiples factores que influyen, sino también por las actividades comunitarias que pueden realizar en el primer nivel asistencial, donde aportan gran valor al paciente y a la comunidad en la que vive.
Retos pendientes
Los fármacos para el tratamiento de la obesidad no están financiados por el Sistema Nacional de Salud, por lo que su uso se encuentra limitado en función de las condiciones económicas del paciente. Desde la SEEN destacan que esta enfermedad afecta a todos los estratos sociales, pero sobre todo a los económicamente más vulnerables, por lo que este aspecto ejerce "un gran impacto discriminativo" frente a otras enfermedades crónicas.
Por su parte, el vocal de la SEEDO, ha reivindicado la necesidad de sistemas a los que se pueda acceder de manera fácil para proporcionar al paciente un diagnóstico y un seguimiento por un equipo especializado. La demora en las listas de espera, "que alcanzan hasta cinco años en algunos hospitales" es otra de las dificultades a las que se enfrentan los pacientes con obesidad grave, que podrían beneficiarse de cirugía de la obesidad, ha subrayado la doctora de Hollanda.
Federico Luis Moya, director ejecutivo de la Asociación Bariátrica Híspalis Nacional, estima necesario que "todos trabajemos para lograr el reconocimiento de la obesidad como una enfermedad crónica y multifactorial para que las personas que viven con obesidad puedan beneficiarse de la Ley de Garantía y, por lo tanto, se conviertan en pacientes de pleno derecho en el Sistema Nacional de Salud". Además, ha incidido en la importancia de poner en marcha un Plan de Estado de Abordaje Integral de la Obesidad, "ya que se lograría la mejor de las estrategias en el abordaje multidisciplinar de esta enfermedad".
Por último, todos los representantes de las sociedades han coincidido en que es fundamental la formación del profesional sanitario, así como de los pacientes con obesidad y la sociedad en general, junto con la implicación de las autoridades sanitarias para acabar con el estigma de esta enfermedad y contribuir a impulsar nuevas estrategias encaminadas a frenar su crecimiento y las enfermedades relacionadas.